Colaborar para que Costa Rica pueda eliminar las desigualdades que viven actualmente sus habitantes, será el principal objetivo de la representación de Naciones Unidas en nuestro país durante los próximos cinco años.
“El gran problema de Costa Rica es que hay ritmos de desarrollo muy distintos, desiguales… Dependiendo de quién es uno, donde nació, de qué comunidad es, todo cambia. Cambia el tipo de servicios a los que puede acceder y la calidad de esos servicios. Es un país de muchísimas diferencias y desigualdades. Por eso, nuestro objetivo es cerrar brechas”, expresó Allegra Baiocchi, coordinadora residente del Sistema de las Naciones Unidas en Costa Rica.
Bajo el lema “Cerrando Brechas”, el nuevo marco de cooperación se enfocará en cuatro aspectos: derechos, institucionalidad, economía y fuerza ante la crisis. El primero tiene que ver con el empoderamiento de las poblaciones vulnerables y el segundo con el fortalecimiento y modernización de las instituciones que se han debilitado durante los últimos años, como por ejemplo, la Caja Costarricense del Seguro Social.
El tercero versa sobre la necesidad de que el país continúe creciendo, pero con una prosperidad compartida, y por último cómo ayudarlo para que esté más preparado al enfrentar crisis como la climática. El tema de género sería transversal en los cuatro enfoques.
La relación de Costa Rica y las Naciones Unidas es de larga data. El país fue uno de los primeros que firmó la Carta de Naciones Unidas en 1945. El trabajo multilateral ha sido intenso desde entonces. Costa Rica es sumamente activo en el tema ambiental y de derechos humanos, donde incluso lidera.
Además, en setiembre del 2015, Costa Rica, junto a otros 192 países, asumió el compromiso de cumplir con los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).
PolitiKAS en Línea conversó el pasado 13 de octubre con Allegra Baiocchi sobre todos estos temas.
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